
El libro incluye un plano, para poder seguir el camino que nos propone el autor, y es una guía indispensable para entender a esta gran necrópolis argentina y saber quién mora en cada uno de sus sepulcros, ornados con placas recordatorias, magníficas esculturas y monumentales mausoleos.
Luego de su exitoso libro "Las mil y una curiosidades de Buenos Aires", Diego M. Zigiotto nos demuestra, otra vez, que la historia y la ciudad de Buenos Aires guardan curiosidades y hechos insólitos. Su nuevo libro es una invitación a descubrirlos.
Hasta la fecha, han sido varios los textos editados sobre este singular y magnífico cementerio, tan visitado por los turistas extranjeros, pero mas allá de la excelencia de los mismos, la riqueza fotográfica o el cuidado en las ediciones, todos adolecían del mismo defecto: una visión parcial sobre los que allí reposan, sus historias o la estupenda arquitectura de los mausoleos. El libro, que hoy damos a conocer, tiene el mérito de proponer un recorrido posible, pero mucho más amplio, en el que se describen -mas allá de lo que pueda complementarse en el futuro- gran parte de la vida y obra de los moradores de este estupendo campo santo.
El cementerio de la Recoleta está considerado como una de las mejores obras arquitectónicas de Buenos Aires y junto al Pere-Lachaise de París y al Staglieno de Génova son, quizás, los cementerios más emblemáticos del mundo. Su gran reputación, su particular estilo y el hecho de que quienes reposan en el mismo forjaran la historia argentina, han contribuido para convertirlo en una de las mayores atracciones de la ciudad de Buenos Aires.

A partir de ahora, el libro de Zigiotto debería formar parte de nuestro acervo familiar, porque en él están descriptas todas las bóvedas de la familia García-Mansilla y en cada caso relata pequeñas anécdotas de nuestros antepasados que son parte de nuestra historia de familia.
Hagamos un rápido repaso sobre su contenido:
Los Aguirre, tienen su historia bajo el número (171) en las páginas 272 y 273. Es una pena la omisión de quién fue el genearca de esa familia argentina: Agustín Casimiro de Aguirre, quién arribó a Buenos Aires el 8 de septiembre de 1744, en comisión del Real Consulado de Cádiz y de su hijo Manuel Hermenegildo Aguirre (1786-1843), patriota que contribuyó con fuertes donaciones a los gastos originados por las invasiones inglesas, que desempeñó una misión diplomática ante los EE.UU., en 1817, enviado por el General José de San Martín, a fin de adquirir cuatro fragatas y gestionar el reconocimiento de las Provincias Unidas, miembro del Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810, que votó contra la destitución del Virrey Cisneros, Ministro de Hacienda de Mariano Balcarce y cuya casa denominada los Altos de Aguirre, estaba al costado del Cabildo en la Plaza de Mayo.
La familia Mansilla, tiene su espacio en el número (268) bajo el título: "La bóveda de los Mansilla." Página 383 y subsiguientes. Allí en relatos muy amenos y de citas del libro "Memorias" de nuestro tío Lucio Victorio, se habla de nuestro cuarto abuelo el General Lucio Norberto Mansilla, de nuestra cuarta abuela Agustina Ortíz de Rozas, cuyos restos reposan en una urna bajo el nombre de: Agustina de Rozas de Mansilla, una más de las tantas curiosidades del apellido Ortíz de Rozas, utilizado por cada uno de sus miembros como mejor le parecía y obviamente de nuestro tío tatarabuelo Lucio Victorio.
Los Ortíz de Rozas, están el número (71) con el sugestivo título;: "Rozas y Rosas". Página 148 y subsiguientes. Se relatan historias referidas a nuestros cuartos abuelos Agustina López Osornio y León Ortíz de Rozas: los padres del restaurador; de "Juan Manuel de Rosas: el polvo de sus huesos (1793-1877)" de "Ercarnación Ezcurra: luto federal (1795-1838)", de "Gervasio Rozas: el solterón (1801-1855)·, de "Prudencio Ortíz de Rozas: a Sevilla y con Palacio (1800-1857)" y de "Juan Manuel Ortíz de Rozas: el nieto", que también fue gobernador (1839-1913)

También forman parte de este magnífico libro, varias queridas familias emparentadas con nosotros, como los Ocampo (119), los Uriburu (70) (191), los Gálvez (51),los Terrero (56) y los Anasagasti (169) entre otros.
Como verán un trabajo de investigación de envergadura que merece nuestro sincero reconocimiento. Recomendamos a toda la familia adquirir un ejemplar de este libro y recorrer el lugar donde reposan nuestros ancestros, instándolos a efectuar una plegaria por el descanso eterno de todos los que nos precedieron en esta vida.
Para quienes tengan interés en adquirir este libro, pueden hacerlo en la Libreria Ulpiano, la que se encargará de proveerlo a cualquier miembro de la familia interesado en tener un ejemplar.
NOTA: Los números entre paréntesis que se indican a continuación de cada nombre, corresponden a las personas que cita el autor en el recorrido que propone.